-En vuestra asociación, trabajáis restaurando y recuperando el patrimonio histórico del valle. ¿Por qué una asociación como la vuestra?
La asociación surge porque había necesidad de hacer cosas en el pueblo. Durante muchos años, nadie se había ocupado de restaurar nada y veíamos que todo se iba deteriorando y había que hacer algo.
-Y… ¿qué es lo que aportáis?
Aportamos mano de obra… Nosotras mismas nos dedicamos a rescatar el patrimonio de Corera. Hemos hecho muchas cosas en 20 años. Lo primero que hicimos fue la restauración de los pasos de Semana Santa (trajes de hace 100 años, imágenes…). No obstante, lo más relevante ha sido la recuperación de El Lavadero y de La Casa del Espartero.
–La Casa del Espartero es un antiguo caserón que habéis rehabilitado durante 10 años. ¿Qué podemos encontrar en él?
La Casa del Espartero es una casa de labradores que data del 1900. Refleja cómo era la vida de entonces. En ella podemos ver mobiliario antiguo, aperos de labranza, trajes de la época, cómo era una cuadra o un gallinero.
-¿Y El Lavadero?
El Lavadero fue construido originariamente en el año 1902 y se ha usado prácticamente hasta los años 90. Era un edificio abierto, que decidimos proteger y acristalar. Tiene luz nocturna y en el colocamos maniquís recreando escenas típicas del lugar: mujeres tendiendo la ropa, señoras con rodete –tela redonda que hace como una trenza para sujetar los calderos en la cabeza-, etc.
-¿Cómo estáis involucradas en el proyecto de ADETUROCON?
Colaboramos todo lo que podemos con el resto de miembros de la asociación y trabajamos con ello para dar a conocer todo nuestro territorio. Buscamos también sinergias con el resto de socios y nos enviamos turistas entre todos.
-¿Cómo es vuestro contacto con los turistas?
Es muy cercano porque contar cómo se vivía hace muchos años traslada a la gente a su infancia, lo que provoca que cada uno cuente sus vivencias. Nosotras contamos y los visitantes nos cuentan. La gente joven y los niños preguntan muchas cosas, porque todo es nuevo para ellos.